El inicio de esta segunda sesión en el
gimnasio fue parecido a la anterior. Comenzamos la clase con el juego de
calentamiento “tula” pero esta vez, conllevaba una variante, en lugar de correr
debíamos de hacerlo agachados, de rodillas o intentando escapar de la forma más
original que se nos ocurriera, sin levantarse. Al principio nos sentíamos un
poco molestas porque nuestras rodillas empezaban a desgastarse y empezaba a
resultar incómodo. Estaba deseando que se acabara el juego.
Luego en cambio, hicimos una dinámica muy
interesante, por primera vez, cuatro afortunados pudieron vivir la experiencia
del primer contacto con el antifaz. Se colocaron en cuatro colchonetas por
separado, y el resto de la clase fuimos al vestuario a que Jorge nos contara la
trama que tenía preparada para ellos. Era muy emocionante porque sentíamos la
curiosidad de ver como reaccionarían nuestros compañeros ante lo que íbamos a
hacerles. El objetivo era empezar a tocarles por todo el cuerpo, mientras ellos
solo podían sentir, no veían nada ni quienes éramos. Luego los trasladamos a
otra parte del gimnasio, todo esto en completo silencio y nos fuimos a un
extremo. Los compañeros estaban quietos, no se movían. Cuando de repente a la
consigna del profesor, empezamos a correr y a chillar como si estuviésemos
locos. La verdad es que fue una dinámica genial y muy divertida.

Para finalizar, hicimos un par de ejercicios
de confianza en los que, primero por parejas y luego por tríos debíamos de
ponernos delante del compañero, cerrar los ojos, y con la total confianza del
mundo intentar caer, depositando todo nuestro peso en nuestro compañero. Ahí,
fue cuando pudimos comprobar la confianza que tenemos en el otro, y la pudimos
aplicar a la vida real, ya que demuestra en si te dejas llevar o no, si confías
en el que tienes detrás o no te fías, aunque ni siquiera lo conozcas.
Sinceramente, creo que este tipo de clases
hace que nos estemos conociendo entre nosotros y cada vez tengamos más
contacto, algo esencial para que estas clases cumplan el objetivo que requiere,
la desinhibición de todos nosotros y la pérdida de vergüenza.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada